La microdermoabrasión con punta de diamante es un procedimiento estético no invasivo que exfolia la piel de forma mecánica para eliminar las células muertas y mejorar su textura y luminosidad. Utiliza una herramienta con una punta recubierta de diamantes que se desliza por la piel, mientras un sistema de vacío aspira las partículas exfoliadas, dejando al descubierto una piel más suave y renovada. Este tratamiento ayuda a estimular la regeneración celular, puede atenuar líneas de expresión y cicatrices, y prepara la piel para una mejor absorción de otros productos.

¿En qué consiste?

Exfoliación mecánica: Una punta recubierta de diamantes se desliza sobre la superficie de la piel, lijando suavemente la capa superior y eliminando las células muertas.

Sistema de succión: Al mismo tiempo, un sistema de vacío aspira las células muertas y partículas exfoliadas para un resultado limpio.

Adaptabilidad: Se pueden usar diferentes puntas con distintos diámetros y granulaciones para tratar zonas específicas y alcanzar la profundidad deseada.

Beneficios principales

Exfoliación profunda y suave: Elimina las células muertas, revelando una piel más suave y tersa.

Renovación celular: Estimula la producción natural de colágeno y elastina, lo que mejora la elasticidad.

Mejora del tono y la textura: Unifica el tono de la piel, reduce el exceso de grasa y minimiza el tamaño de los poros y los puntos negros.

Atenuación de imperfecciones: Puede ayudar a disminuir la apariencia de líneas finas, cicatrices leves (como las del acné) y decoloraciones.

Preparación de la piel: Prepara la piel para una mejor absorción de otros tratamientos y productos.

¿Para quién es ideal?

Es un tratamiento adecuado para personas que buscan una piel más limpia, suave y luminosa, y puede ser beneficioso para tratar problemas como poros dilatados, exceso de grasa, puntos negros y textura áspera.